"Alivio, eso fue lo primero que sentí”, confirmó el DT Gustavo Alvarez, luego del feliz desenlace del domingo, en el que el Gasolero aseguró su permanencia en Primera. Alvarez agarró un fierro caliente tras la inesperada salida de Delfino, y pudo lograr el objetivo trazado con una fecha aún por jugarse.
El entrenador, que en principio asumió al mando del equipo por las últimas tres fechas, no se deja ganar por la ansiedad de lo que vendrá: “Con los dirigentes hicimos un pacto de que hasta que finalizara el torneo no íbamos a pensar en el futuro, y lo vamos a cumplir”. Y tiró pensando en la última fecha, ya salvado: “Queremos ganarle a Racing”. Temperley no se conforma y quiere un poco más.
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